Casi uno de cada cuatro estudiantes de Bachillerato reconocen que han utilizado en alguna ocasión 'la marcha atrás' como método anticonceptivo en las relaciones sexuales. Según una encuesta de la asociación Sida Studi, que ha preguntado a más de 500 jóvenes, el 87% de los adolescentes usaron preservativo habitualmente, pero el 25% reconocen que de manera irregular.
El 19% de los alumnos de entre segundo y tercero de la ESO, que tienen 14 o 15 años, ya han mantenido relaciones sexuales con penetración. Este porcentaje se eleva hasta el 42% entre los estudiantes de Bachillerato.
La mayoría de adolescentes que no utilizan preservativo argumentan que no es un método del todo seguro, ya que se puede romper, o les "corta el rollo". También hay que no se atreven a comprarlos por vergüenza. Uno de cada seis jóvenes ha tenido que usar la pastilla del día después.
Antes estas estadísticas, la asociación Sida Studi reclama que la educación sexual esté presente en los institutos. Según la entidad, es la mejor manera de garantizar que los jóvenes tengan acceso a información real sobre la sexualidad. De hecho, el 65% de los alumnos de segundo ciclo de la ESO solo reciben clases de educación sexual a través de entidades externas como Sida Studi. Más de la mitad de los adolescentes suplen la falta de información consultando dudas en Internet o amigos.