Gracias a los profesores que me han ayudado a luchar por mis sueños [Carta]

Hemos recibido una carta de un lector de adolescentes.com que explica su experiencia como alumno en un centro escolar de refuerzo donde allí los profesores le han ayudado a alcanzar sus objetivos:
 
"La Educación en España. Ante todo lo pienso y me pregunto, "¿qué es?". Miro el panorama e inevitablemente diría que es como un balón de fútbol mal construido que está dentro de las aulas. Una pelota cuya simple construcción la compone un inicio marcado por la Educación Infantil donde el objetivo es "enseñar" a niños a permanecer quietos, continuando por la Educación Primaria cuando el propósito es seguir machacándoles a base de una gran cantidad de ejercicios inútiles al compás de enseñarles a ser estatuas en sus pupitres. Seguidamente nos metemos en la E.S.O donde la cuestión se basa en la transformación de los alumnos en robots de hacer esquemas para aprobar exámenes y ya para acabar nos encontramos con el temido bachillerato cuyo fin es que el alumnado se hinche a hacer exámenes a porrillo para que tenga la calificación numérica como obsesión.

 Y ya está, así es todo esto, punto en boca. Como decía, esa pelota de fútbol que no deja de dar vueltas y que está elaborada como por "obra de mano barata" por señores trajeados con una corbata tan apretada que parece que no les permiten pensar, los políticos, aquellos que junto algunos profesores le dan constantemente unas patadas mal dadas a este balón. Junto algunos profesores, ciegos, que no se esfuerzan en ver personas ni en ver valores éticos o de la vida real, dedicándose únicamente en su absurdo temario olvidándose así por completo del fondo emocional de esos chicos que tienen delante con todo su conjunto de creencias, valores, autoestima y de problemas, sus alumnos. Y sí, los mismos profesores que reflexionan sobre el bullying o el absentismo escolar. Educación, aquello que dicta nuestro futuro, pero que también nos hace crecer como personas y nos hacer ser quienes somos.



Pero afortunadamente en medio de todo este cuadro tan feo hay gente y sitios que no hacen de la Educación esa pelota tan fea que estoy pintando, al contrario, la convierten en un estadio más asombroso y excelente que el Camp Nou.

Sitios y profesores como los de Athenea Centro de Estudios y Athenea Centro de Idiomas de Cartagena, donde puedo afirmar que lo primero es el alumno y además puedo decir enorgullecido que llevo estudiando allí ya dos años, y que han sido mis dos mejores años como estudiante. Llegué a este centro desde un instituto sin ninguna ilusión ni motivación, y todo eso se transformó gracias a todo su equipo docente con unas numerosas horas de estudio, esfuerzo y de pasarme allí mañanas y tardes enteras trabajando, pero además encantado y con ilusión cada día gracias a la motivación que se me brindaba. Para de todo el equipo de este centro solo tengo gratitud sincera por ser como de mi familia y por hacerme aprender mientras disfruto. Este Centro no sólo se basa en conseguir hacerte llegar al objetivo profesional, también se basa en el crecimiento personal con el día a día, atendiendo y prestando toda la atención a las aptitudes y dificultades que le van surgiendo a cada alumno, y peleando constantemente hasta que desaparezcan para poder llegar a un propósito.



Además, enseñando valores tan importantes que ningún libro ni ninguna libreta de apuntes nos ofrecerán jamás, y qué aquí lo demuestro, ya que para ellos solo tengo palabras de cariño por todo lo que me han aportado y ayudado. Gracias a Ana, profesora de Lengua, por contagiarme ese espíritu perfeccionista para trabajar que desde ahora siempre tendré en cuenta. Gracias a Manolo, profesor de Matemáticas y de Ciencias, por tener la paciencia de explicarme todos los días la misma fórmula de la distancia y de hacer que con el tema más coñazo de física me vaya riéndome a casa, y además con la lección aprendida. Gracias a María, profesora de Geografía e Historia, escuchándome tarde tras tarde apoyándome y aconsejándome con todas mis complicaciones, por enseñarme que venga lo que venga siempre hay que levantarse y seguir, por confiar en mí desde el primer día que me conociste mientras le enseñabas a un patoso como yo a hacer cosas que antes creía imposibles como un simple esquema, todo esto mientras me pegas tu "espíritu runner", de que por mucho de que cueste llegar a una meta jamás hay que quitarse las zapatillas y dejar de correr hasta llegar a su fin plantándole cara a todo lo que aparezca durante el camino.



Gracias a Rosalía, profesora de Lengua Castellana e Inglés y directora de Athenea; por hacerme sentir feliz en tus clases contagiándome tu optimismo, haciendo que alguien que no sabía unir ni tres palabras hoy esté escribiendo esto, por poner toda tu confianza en mí y en todo lo que puedo llegar a lograr, enseñándome el significado del esfuerzo y su recompensa mientras que al mismo tiempo siempre me levantas a base de ánimos cuando me caigo, enseñándome que si aparece una piedra, poco a poco, tengo que trabajar hasta romperla para poder seguir hacia delante, por estar siempre ahí cada día y escucharme siempre que lo necesito con conversiones infinitas ayudándome a derribar mis muros, recordándome cada vez que se me olvidan todas aquellas cualidades que me hacen ser quién soy, enseñándome que en ocasiones hay que actuar y luego pensar.



Junto con unos valores que para mí antes no existían y que te prometo desde aquí que ya jamás olvidaré; la gran importancia de disfrutar de lo que hacemos a cada instante, de enseñarme a apreciar todo lo que tengo e intentar disfrutar del presente y de todas aquellas esas pequeñas cosas que nos llevamos del camino aunque su fin nos sea desconocido. Doy las gracias en general por enseñarme cosas que jamás se aprenderán en ningún libro de texto, y directamente cosas que nunca había aprendido, yendo más allá de simple teoría. Haciendo que en estos dos años de clases, y los que quedan, jamás me haya caído o desviado de mi meta, consiguiendo las mejores notas de mi vida. Y por supuesto agradecer que a Athenea Centro de Estudios haya conseguido que el próximo curso pueda dar ya el primer paso para dedicarme a estudiar lo que siempre he soñado.

Espero que todo esto no sólo sirva como gratitud hacía todo ellos, también espero que haya servido para que cualquiera que lea esto vea que hay docentes que de verdad aman su trabajo y que de verdad se preocupan por el alumno. Y no sólo centrándose en un temario vacío con clases insignificantes que jamás nos aportaran nada como seres humanos. Dedicado a los mejores profesores que he tenido y a los mejores profesores que hay que han puesto todo su empeño y conocimiento para conseguir que el futuro sea el que yo decidido para mí. A todos, gracias.

Jesús Zabala"

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