Alba se ha vestido durante una semana como la cantante de Barbados. El próximo jueves
Rihanna actuará en Barcelona. Para muchos es considerada una de las mujeres más sexys del planeta, una gran cantante y una celebrity única.
¿Has pensado alguna vez qué pasaría si vistieras con la ropa que lleva ella? Quizá luego ya no serías una diva y más de uno/a te diría que te has vuelto loco o se apartarían de ti cuando fueras andando por la calle.
¿Por qué ocurre esto? ¿Por qué nos gusta ver en otras personas la ropa que nosotros nunca llevaríamos?
He querido hacer un pequeño experimento y me he vestido durante una semana igual que Rihanna para vivir en mi propia piel qué siente la cantante cuando viste con sus looks tan atrevidos. Ayudada por la escuela
Thuya me he "tuneado" como ella con la ropa que tenía por casa (¡no se vale comparar nada!). Este ha sido el resultado:
DÍA
Mi idea era intentar copiar el look, lo más parecido posible, con la ropa que tenía por casa. Por eso
utilicé ropa de mi padre, de mi madre y de mi hermana. Mi hermana es de las que se cabrea muchísimo cuando se entera que alguien le ha cogido ropa, pero en este caso le pedí permiso y me dejó alguna piezas de ropa.
El primer look que escogí para encarnar a Rihanna es el que lleva en el videoclip de
Work, donde aparece con
Drake.
Me pareció suficiente atrevido para vestirlo y que la gente me preguntara por qué iba envuelta con una bandera. El vestido me lo hice yo -con ayuda de mi abuela- con un antiguo disfraz que tenía en una antigua caja. Tenía miedo por el resultado, pero por suerte me quedó bastante bien.
Cuando salí a la calle con el vestido la gente me miraba...imaginé que iba a un festival de final de curso del instituto, y al creerme la idea, me sentí más segura.
DÍA
Después de la adrenalina del día anterior quería bajar el ritmo y vestirme un poco más "normal". Era un martes a las 7 de la mañana y necesitaba escoger un look perfecto antes de salir de casa.
Abrí todos los armarios del piso para encontrar alguna pieza de ropa que se pareciera a algún look de Rihanna, pero de repente, la encontré; ¡la camisa a rallas de mi padre! Era idéntica a la de Rihanna, hasta llegué a pensar que la misma Rihanna se la había robado a mi padre y luego se la volvió a dejar en el armario. Complementando el look con unos zapatos de vestir de invierno conseguí la combinación perfecta. ¡Solo me faltaba llevar el pelo pelirrojo!
DÍA
Como el día anterior tampoco había llamado mucho la atención con mi ropa (parecía más bien una blogger de esas que se disfrazan para parecer cool), decidí salir con unos pantalones de pijama blancos, una camiseta con anillas bajo los pechos, que por cierto me compré un día por dos euros en las rebajas para subirme el ego y hacerme sentir más sexy, y finalmente completé el look con unos collares de mi abuela. Los estilistas de Thuya se encargaron de peinarme y maquillarme.
DÍA
Intenté emular el estilismo que escogió en su momento Rihanna para ir a recoger un premio, pero en vez de conseguirlo, me di cuenta que había conseguido un look muy raro. El pañuelo de la cabeza era realmente un cinturón de piel que me daba mucha calor, por no hablar de la chaqueta de cuero...¡que en pleno mes de julio me moría de calor!
DÍA
¿Cómo se vestiría Rihanna un viernes cualquiera? Teniendo en cuenta que suele ser "casual day" por excelencia, decidí coger una gorra promocional, mis gafas de sol Meller que me habían regalado el día anterior, unas cadenas que estaban en un joyero y un vaso de plástico. ¡Luego salí a reventarlo al más puro estilo chunga!
Realmente hubiera estado más cómoda si no fuera porque iba con sujetadores (he de reconocer que me tapé con una chaqueta para salir. Vale, hice un poco de trampa).
DÍA
Este es uno de mis looks favoritos. Aunque al principio no me llamaba mucho la atención, ya que prácticamente todo el mundo tiene unos tejanos y una camisa tejana en su fondo de armario, hay alguna cosa que lo hace ser especial. En este caso eran las trenzas y los labios oscuros los que rompían con aquella monotonía textil. La postura despreocupada de la diva también le da un toque muy personal.
DÍA
Uno de los días, por lo menos, me tenía que vestir de gala. Era domingo y el día se lo merecía. Vestida solo con una americana, unas medias y unos zapatos, me sentía como si me faltara alguna cosa más en el interior (¡por no decir que es horroroso pensar que en cualquier momento se me puede salir por un lado algún elemento de mi anatomía!).
FIN DEL EXPERIMENTO
Por suerte, hacer de Rihanna se me acababa y pude sacar mis propias conclusiones.
Ser sexy como ella es una cuestión de actitud.
Vestirme como lo hace ella me ha hecho sentir ridícula y hasta a veces disfrazada. La gente que me miraba por la calle pensaba: "¡mira esta estúpida que se le ha olvidado la camiseta en casa!".
Con todo esto me he dado cuenta que, hagas lo que hagas y vistas como vistas, es igual lo que piensen los demás de ti. Lo más importante es sentirte a gusto con lo que llevas. No quieras ir vestida igual que tu compañera de clase solo por parecerte a ella. No te dejes influenciar por aquellos que te dicen en cada momento lo que te tienes que poner. Hazlo porque te gusta de verdad y porque te sientes bien con lo que haces.
Todo se puede llevar si lo haces con gusto y muchas ganas.
Un artículo de Alba Carreres
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